Maras se pinta de blanco
Una brisa salada me da la bienvenida, y el agua que me salpica de los conductos, mientras registro algunas fotografías, termina pintando de blanco mi rostro, mis brazos y el lente de mi cámara. Estoy en Maras, a 50 kilómetros de la ciudad del Cusco. Es la primera vez que llegó a este extraordinario lugar, […]