Votemos con amor al Perú, apostando por un gobierno democrático

Antes que venza el plazo para hablar de política y hacer propaganda, quisiera compartir con ustedes algunas reflexiones:

Votemos con amor al Perú, apostando por un gobierno democrático, que garantice nuestras libertades y derechos, sin censura ni mordazas, sin persecuciones y asesinatos a opositores y críticos.

Votemos por el Perú que exige nunca mas el retorno de un gobierno de dictadura, sino un gobierno que apueste por su desarrollo, con el reconocimiento de todas sus instituciones y la defensa de la persona y su dignidad.

Dejemos de votar por organizaciones políticas criminales que ya le traicionaron la confianza y le robaron al Perú. Se estima que el fujimorismo le robó a los peruanos, de manera inmisericorde, 6 mil millones de dólares, dinero con el que fácilmente se ha podido construir 10 aeropuertos a nivel nacional, del nivel del terminal aéreo de Chinchero, 6 mil kilómetros de asfalto de vías y muchas cosas mas.

Nunca mas le demos la confianza a políticos adiestrados en actos de corrupción, lavado de activos, narcotráfico y crímenes. Esta probado que el fujimorismo encarnó un gobierno corrupto, de la mano de Alberto Fujimori y Vladimiro Montesinos, con el aval cómplice de la entonces Primera Dama de la Nación, Keiko Fujimori, a quien no le importó ni su propia madre.

No elijamos al verdugo de los peruanos, sino a un gobierno que haga reverdecer el país. Tampoco confiemos al gato de despensero, que así como ocurrió en la nefasta década de los `90, terminará desfalcando la despensa peruana.

Elijamos bien, votemos conscientes, midiendo el gran peligro y amenaza que representa el fujimorismo para el país. La única forma de evitar el retorno de fujimorismo, es no votando blanco y nulo, sino por Pedro Pablo Kuczynski. No hay otro camino.

Este 5 de junio tenemos que decirle al fujimorismo, que no queremos ser gobernados por la hija de un delincuente, que no nos sentimos representados por esa candidata cuyos familiares están presos y otros prófugos. Por favor, cómo le explicaría a mi hija que voté por una candidata cuyo padre está preso por asesino, que le robó al Perú y que sus familiares huyeron del país a fin de no ser encarcelados.

«La hija de la cebra, igual de rayada nacerá», decía hoy en una entrevista con Cusco en Portada el docente universitario Alberto García, en clara alusión a que doña Keiko no salió pues inmaculada o reformada, por el contrario, heredó la maña de su padre que robó, corrompió e hizo matar a decenas de peruanos.

Votemos bien, votemos por el Perú. Keiko no va. Nunca mas fujimorismo.

Carlos Carrillo Berveño